Un granadino reclama al SAS porque su pene quedó demasiado corto

Las operaciones no siempre salen como esperaban los pacientes. Hoy comentamos una noticia publicada en el diario Ideal de Granada que informaba sobre la desestimación de una reclamación al SAS. El paciente pretendía recibir 165.000 euros porque la prótesis que se le implantó en el pene no alcanzaba los 17 centímetros. La prótesis daba solución a su disfunción eréctil.

Los hechos ¿Qué reclama el paciente? 

El paciente acude en el año 2016 para tratar su problema de disfunción eréctil. Para darle respuesta se le implanta una prótesis de activación mecánica que tiene que ser cambiada por otra semirrígida por la hipersensibilidad del paciente. Las prótesis es de unos 17 centímetros y se implantan dentro de los cuerpos cavernosos del pene. El paciente reclama porque el tamaño del pene se ha quedado en torno a los 8 centímetros, lo que está muy por debajo de los “17,5 centímetros prometidos”.

¿Cuál ha sido la respuesta del Servicio Andaluz de Salud?

El SAS estudió la reclamación del paciente. Dada la cuantía de la misma, fue necesario emitir un informe vinculante. En el mismo se recoge que al paciente se le informó, incluso con láminas para ilustrarle de cómo era la operación y de las consecuencias de la misma. Igualmente, se le volvió a intervenir para dar solución al problema de la hipersensibilidad. Finalmente desestiman la reclamación porque “defraudar al paciente en sus expectativas no supone ninguna negligencia médica“.

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¿Qué se requiere para que haya negligencia médica?

Los requisitos básicos para poder reclamar una negligencia médica son los siguientes:

  1. Que no se atienda el deber de cuidado al paciente. El caso más claro de este tipo de incumplimientos es cuando no se realizan determinadas pruebas y estas no se hacen.
  2. Incumplimiento de estándares y protocolos para determinados casos.
  3. Existencia del daño, real y cuantificable.
  4. Relación de causalidad entre el incumplimiento médico y el daño producido.

Los casos más comunes suelen ser retrasos en el diagnóstico, mala praxis en alguna intervención, una medicación inadecuada, un mal seguimiento del paciente..

Casos reales de reclamaciones al SAS por mala praxis médica.

Es habitual que se produzcan algunas negligencias que sí son respondidas por la administración de salud. En este enlace podréis leer la noticia completa del caso de un varón al que se le indemniza con 54.000 euros por la pérdida de un testículo. El paciente acudió a urgencias con dolor abdominal derivado de una torsión testicular que se diagnosticó tarde. Como consecuencia de esto, perdió con 14 años el testículo izquierdo.

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